Productores analizaron los problemas y alternativas del sector cafetalero
Relanzar la caficultura como una alternativa de negocio y no como una actividad de subsistencia fue una de las propuestas presentadas recientemente en el foro “Análisis sobre alternativas para el sector cafetalero en tiempos de crisis”, actividad organizada por el proyecto de TCU Capacitación a Microempresarios.
La actividad contó con la participación des Sr. Guido Vargas, presidente de la Junta Directiva del ICAFE; Sr. Luis Zamora, representante del Viceministerio de Agricultura; Sr. Damián Mejías, gerente de Coopeldós R.L.; Sr. Óscar Campos, presidente del consejo de administración de Coocafé y el Sr. Juan Diego Araya, gerente de compras de FJ Orlich.
En la actividad los panelistas expusieron una serie de problemáticas a las que se han enfrentado los cafetaleros en los últimos tiempos, así como nuevas formas de asumir la actividad.
Según los panelistas el poco acceso a financiamiento, los altos intereses y costos de producción, las importaciones de café, las plagas, el relevo generacional y el cambio climático son algunos de los problemas que enfrentan los productores de café a diario.
El relevo generacional es uno de los puntos más destacados, ya que son menos los jóvenes quese integral a la producción cafetalera debido a los problemas que se enfrentan. Tanto la cantidad de productores como la cantidad de hectáreas producidas han bajado en los últimos años, teniendo en la actualidad 47 mil productores para 84 mil hectáreas.
Nuevas oportunidades
Los panelistas coincidieron en que el cafetalero debe tener un pensamiento empresarial agresivo, que lo haga identificar nuevos mercados, nuevas formas de producir y nuevas posibilidades de negocios.
Luis Zamora del Viceministerio de Agricultura destacó que desde el MAG, el Ministerio de Ambiente y del ICAFE se está trabajando en un proyecto que busca la transformación de la caficultura a una más sostenible, aprovechando los valores que ya el país tiene como un país verde y ecológico se busca el reconocimiento a nivel internacional como una forma de facilitar negocios.
La creación de marcas propias de café de diferentes calidades fue uno de los ejemplos utilizados por el Sr. Oscar Campos, presidente del consejo de administración de Coocafé, de cómo algunas de sus cooperativas han reinventado el negocio.
También mencionó, la transformación de algunos beneficios en fincas turísticas que producen su propio café y que a la vez ofrecen recorridos guiados en sus instalaciones. “Hay cooperativas en Sarapiquí que produce muy poco café y todo lo comercializa a través de paquetes, convirtieron su beneficio en un lugar turístico y los turistas vienen, hacen el recorrido y les compra el café. No es para sustituir la cosecha del café, es porque tenemos que aprender a vender el producto de forma novedosa” aseguró.
Mencionó que algunas cooperativas están haciendo alianzas estratégicas con marcas de productos de belleza internacionales, que usan el café para elaborar sus productos. “En estos temas es importante que el ICAFE y las universidades nos ayude a pensar una forma diferente de pensar el café, nos hemos alejado muchos de la academia y es importante la asesoría”.
El Sr. Juan Diego Araya, gerente de compras de FJ Orlich, presentó algunas mejoras que está haciendo FJ Orlich para garantizarle mejores condiciones a los productores. De esta forma, mencionó que están buscando pólizas de riesgos para los cultivos, están trabajando en un plan de pensiones que les asegure el futuro a los productores y cuentan con un plan de recuperación de fincas para que productores de empuje compren las tierras que otros cafetaleros ponen a la venta.
El Sr. Guido Vargas, presidente de la Junta Directiva del ICAFE, destacó que a nivel nacional se debe de reconocer la importancia de la sostenibilidad de la economía del café, “si eso no se da difícilmente vamos a ser sobrevivientes, es importantísimo no solo porque somos productores, sino porque generamos riqueza y generamos empleo”.
Todos coincidieron en que se tiene que realizar una serie cambios a nivel nacional, tanto de las instituciones que apoyan al agro, como de la forma que manejan los cafetaleros la producción para mantener y fortalecer esta actividad en el país.